sábado, 19 de diciembre de 2009

Odio como me hablas, no soporto que me mires así. Aborrezco que leas mi pensamiento. Me repugna tanto lo que siento que hasta me salen las rimas. Odio que me mientas y que tengas razón, odio que alegres mi corazón, pero aún mas que me hagas llorar. Odio no tenerte cerca y que ni me hayas llamado. Pero sobre todo odio no poder odiarte, porque no te odio, nada en absoluto...

No hay comentarios:

Publicar un comentario